En Perú, cerca de 700 mil hogares aún viven sin acceso a electricidad, según cifras del Observatorio Nacional de Prospectiva del Centro Nacional de Planeamiento Estratégico (Ceplan). Esta realidad evidencia la urgencia de cerrar las brechas de infraestructura energética, especialmente en zonas rurales donde la conexión a la red eléctrica convencional es limitada o inexistente, porque el costo unitario de extender estas redes hacia estas zonas rurales resulta prohibitivo (oneroso) en el contexto de la rentabilidad social proyectada.
Frente a este reto, RenovaVida, programa de intervención social público-privada, ejecutará proyectos de electrificación rural mediante Sistemas Fotovoltaicos Autónomos (SFVA), que beneficiará a más de 197 mil viviendas (alrededor de un millón de personas) en 24 regiones del país. Esta iniciativa se enmarca en las concesiones otorgadas por el Ministerio de Energía y Minas (Minem) y forma parte de la estrategia nacional de inclusión energética con energías limpias y sostenibles.
El objetivo de los proyectos no sólo es dotar de electricidad a estas comunidades, sino también acompañar la continuidad del servicio de manera permanente, atendiendo oportunamente los requerimientos de los usuarios del servicio. Este acompañamiento es fundamental para asegurar el impacto social de esta política pública, cuyos indicadores básicos pueden ser: promover la integración familiar en actividades nocturnas, facilitar el acceso a la educación y al conocimiento, optimizar uso del tiempo en labores domésticas gracias al uso de artefactos eléctricos y habilitar oportunidades económicas en zonas históricamente excluidas.
El despliegue del servicio se realizará de forma progresiva. Se empezará por las regiones de Loreto y Cusco durante el primer año y seguidamente se avanzará hacia el resto de regiones comprendidas en el Proyecto: Amazonas, Ancash, Apurímac, Arequipa, Ayacucho, Cajamarca, Huancavelica, Huánuco, Ica, Junín, La Libertad, Madre de Dios, Lambayeque, Lima, Moquegua, Pasco, Piura, Puno, San Martín, Ucayali, Tacna y Tumbes.
A través del uso de tecnologías renovables, RenovaVida busca ofrecer un servicio continuo, confiable y adaptado a las condiciones socio-económicas locales. La instalación del sistema será gratuita para cada vivienda, debiendo el beneficiario asumir un compromiso de pago mensual por el servicio. Dicho pago será ajustado a la ubicación geográfica y condición social de cada comunidad, y no será superior al pago equivalente que le corresponde a una familia de bajo ingreso de una zona rural con conexión a la red (alrededor de 8 soles por mes). RenovaVida brindará facilidades de pago acordes con la realidad socio-económica de las familias en condición de vulnerabilidad en zonas rurales.
Con estas iniciativas, RenovaVida reafirma su compromiso con el desarrollo sostenible y la mejora de la calidad de vida de miles de familias peruanas, aportando al cierre de una de las brechas más urgentes del país: el acceso a la energía.
